El desafío nuclear

Ensayo nuclear realizado por Estados Unidos en Enewetak, un atolón de las Islas Marshall, el 1 de noviembre de 1952. Foto: Cortesía https://news.un.org/es/story/2020/10/1483002

Anne Sophie Cominu-Bertein Salazar

La creación de armas atómicas siempre ha sido un asunto de gran interés internacional puesto que, al conocer sus grandes capacidades de destrucción, dichas armas son analizadas con gran delicadeza por su gran viabilidad de dañar la seguridad internacional de maneras inconcebibles. Ahora bien, los cinco países que tienen en su disposición la bomba nuclear son: China, Rusia, EE. UU, Francia y el Reino Unido; no obstante, dentro de la comunidad de las Naciones Unidas crece el temor que otros países se sumen en la adquisición de este tipo de arsenal ¿Cómo controlar dicha proliferación?

Se ha escuchado que la energía nuclear no siempre se utiliza como motor para creación de la bomba nuclear, sino que es utilizada con “fines civiles” porque dicha energía es de gran potencia, pero amable con el medio ambiente contrario a otros tipos de energías. Sin embargo, ¿podemos creer que un país que tiene la tecnología para lograr la separación de átomos de uranio 235 se va a limitar a solo producir dicha energía con fines civiles, cuando tiene la oportunidad de tener un arma de gran magnitud? Ahora bien, es responsabilidad de la comunidad internacional el controlar el desarrollo desmesurado de estas armas atómicas puesto de lo contrario habría un gran peligro de dichas armas estén bajo las manos de personas sometidas en soberbia o el poder, atrayendo la posibilidad de vivir una guerra nuclear.

Según Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI), en enero del 2019, existen 13,875[1] reservas mundiales de armas nucleares, las cuales: EE. UU (6,185 bombas), Rusia (6,500), Francia (300), Reino Unido (200) y China (290). Incluso si señalamos que sólo están facultados dichos países para poseer bombas nucleares, acordado en el Tratado de No Proliferación de Armas Atómicas- porque las poseían antes del 1 de enero de 1967- hoy en día hay más países que se suman a la posesión de este arsenal que son: Israel, Pakistán, Corea del Norte e India.

Prosiguiendo con la información expuesta, para ponerlo en perspectiva se necesitan de 3 bombas nucleares para destruir una ciudad con más de 100,000 habitantes. Entonces entendemos que con todos estos arsenales a la disposición de estas grandes hegemonías se podría destruir las más grandes ciudades del planeta y aun así tener 1,500 bombas nucleares extras[2].

Ahora bien, teniendo este dato a consciencia, entendemos la emergencia a disminuir la proliferación de dichas armas que ponen en peligro la vida del ser humano, pero también el equilibrio climático. Se ha tomado medidas de control como el Nuevo Tratado START[1] promulgado en el 2011 que es un tratado entre EE. UU y Rusia para reducir las armas nucleares.

Incluso si sigue existiendo una amenaza viable a un ataque nuclear con los países que tienen dicha arma actualmente, sería un riesgo que se podría limitar con la doctrina MAD entre los cinco países y los países que tienen uranio enriquecido o plutonio. Sin embargo, ningún otro país puede entrar a dicho grupo porque no habría el control suficiente para someterlo a un régimen estricto de control; por eso las Naciones Unidas no se puede permitir someter dicha propuesta bajo un régimen democrático y declarar el Tratado de No Proliferación de las Armas Nucleares como un pacto imperativo para los países con el fin de mantener el orden y la paz internacional.

 

[1] U.S. Department of State. (s.f.). New START Treaty. U.S. Department of State. Recuperado de: https://www.state.gov/new-start/

 

[1] Stockholm International Peace Research Institute. (2019). Annual Review 2019. SIPRI. Recuperado de: https://www.sipri.org/sites/default/files/Annual%20Review%202019_Revised_0.pdf

 

[2] Kurzgesagt-In a Nutshell. (s.f.). What If We Detonated All Nuclear Bombs at Once?

. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=JyECrGp-Sw8. [12/05/20].

[3] U.S. Department of State. (s.f.). New START Treaty. U.S. Department of State. Recuperado de: https://www.state.gov/new-start/