SERVICIOS DE PLATAFORMAS, “LA NUEVA ESCLAVITUD DIGITAL”.

Por: Víctor Galindo (Vigaro)

Una actividad que en sus inicios generara amplia expectativa entre miles de personas de todo el país, ahora es un problema complicado, ya que las condiciones laborales y de gratificación se han desvirtuado, absorbiendo el operador de las unidades, hasta el 80 por ciento de las deducciones, penalizaciones y otras retenciones que las transnacionales aplican sin mayor explicación.

En rueda de prensa, la Dip. Federal con licencia, Abril Alcalá Padilla, señaló que al igual que otras simulaciones gubernamentales, esta actividad ha sido manipulada por las propias autoridades, que han omitido su responsabilidad, permitiendo el abuso de las transnacionales, quienes trasladan dichas obligatoriedades a los denominados “socios”.

“Ellos asumen los costos generales generados por el mantenimiento de la unidad, los pagos de impuestos federales y estatales, el pago de los seguros de los vehículos (30 mil pesos), hasta imprevistos donde se vean involucrados los operadores, llámense incidentes, accidentes o imprevistos” dijo.

Agregó Alcalá Padilla que empresas como Uber, Didi y otras, disponen, administran, califican y se reservan las decisiones laborales para cubrir los ingresos de sus “socios”, sin embargo, esto es manejado discrecionalmente, lo que ha generado descontento entre los “socios” de estas plataformas de servicio. “Trabajan en esto más de 500 mil personas en todo el país, solamente en Jalisco se estima que 50 mil personas trabajan como conductores de servicio público de transportes, otros 250 mil participan en servicios de entrega de alimentos, de estos, al menos 100 mil se desempeñan como repartidores de productos y 150 mil más dan servicio a restauranteros”.

Explicó que por cada 100 pesos, la plataforma se lleva más del 50 por ciento, pero no cumple con alguna obligatoriedad laboral, “les cobran 25 por ciento por concepto de taza de servicio, 2.1 por ciento por ISR, 8.0 por ciento de IVA, 1.5 por ciento de impuesto estatal, 9.0 por ciento por solicitud de servicio, además de otras por concepto de reducción de tarifa por promoción (establecida por la compañía) y sanciones por cancelaciones o quejas de los usuarios, a eso hay que agregar que por el uso de la plataforma, los operadores (socios) pagan otros 25 pesos y la gasolina, refacciones, etc”.     

Recordó la política jalisciense que esta actividad se encuentra muy lejos de lo que pudiera considerarse un TRABAJO DIGNO, es por eso que ya se planea una serie de reformas a la Ley Federal de Protección al Consumidor para que la Procuraduría Federal del Consumidor sea competente en lo relativo a las comisiones y tasas que se cobran por servicios relacionados con aplicaciones digitales, garantizando que no se puedan invocar términos y condiciones de uso o servicio al momento de solicitar su intervención.

Entre las modificaciones resaltan que se definan como consumidores a todas aquellas personas que utilicen u ofrezcan sus servicios vía dichas aplicaciones y las empresas que las ofrecen sean reconocidas como proveedores. Así, puntualizó Alcalá Padilla, “Como consumidores, todas aquellas personas que utilicen u ofrezcan sus servicios vía dichas aplicaciones, disfrutarán de todos aquellos derechos y procedimientos que la Ley Federal de Protección al Consumidor otorga”.

En cuanto a los proveedores de dichas aplicaciones digitales, deberán cumplir con la legislación federal y local que en materia laboral, fiscal y de movilidad que les sea aplicable.

Los servicios ofertados tanto para los consumidores serán ofertados mediante contratos de adhesión que serán revisados y aprobados por la PROFECO.

En el caso de la legislación laboral, se planea una reforma al Artículo 8º de la Ley Federal del Trabajo que reconozca al trabajador no solamente a la persona subordinada a un patrón, sino también a todos aquellos que ofrezcan un servicio remunerado.

En materia laboral, los proveedores de aplicaciones digitales serán reconocidos como intermediarios, por lo que deberán cumplir con las obligaciones que para el efecto la misma Ley establece. “En armonía con el reconocimiento que se hace al artículo 8º de la Ley Federal del Trabajo, se incluye en la definición de las relaciones de trabajo, el pago de una comisión como un elemento adicional al pago de un salario para establecer la existencia de las mismas” resaltó.

Finalmente, propone la legisladora con licencia, actualizar el capítulo relacionado con los servicios de transporte de pasajeros para que se incluya como parte de las empresas que ofrecen dichos servicios a las aplicaciones digitales.

En su participación testimonial, los prestadores de estos servicios,  Shadia Barham Shahin, .Rocío Guzmán Guitron y César Ricardo  Castillo Durón, coincidieron en señalar que por términos y condiciones no explicados, las plataformas digitales dejan de pagarles bonos, “no hay reglas claras ni un trabajo digno, tampoco existen condiciones que garanticen la integridad de quienes salimos a brindar un servicio, las autoridades protegen más a los delincuentes que a quienes salimos a buscar un sustento de manera legal, se ha convertido en una esclavitud virtual”, ante este triste panorama, aquellos “detalles” que hicieron la diferencia entre los taxis tradicionales y los servicios digitales por plataforma, (dulces, aire acondicionado, agua embotellada y otros) simplemente ya no es costeable, por lo que se ha suspendido otorgarlos.

Por su parte, quienes se desempeñan repartiendo productos y alimentos a domicilio, tienen que pagar sus uniformes, mientras que la mochila oficial de la empresa tiene un costo por membresía que oscila entre los 800 y mil pesos cada una.

La legisladora por Jalisco, concluyó argumentando que existen estas prácticas laboristas en la actualidad que violentan los derechos de quienes se emplean, ejemplo de ello son las plataformas y el outsourcing, respecto a esta otra práctica laboral de subcontratación, criticó a las autoridades, incluso al Congreso de la Unión, en donde la tercerización laboral es una práctica “normal” disfrazada en el doble discurso.